La tasa que paga tu cliente es fija durante todo el período del préstamo. En cambio, las tasas de las tarjetas de crédito o cuenta corriente son variables y pueden aumentar.
Asimismo, tu cliente puede financiarse sin necesidad de tener una tarjeta de crédito, ahorrándose el costo de mantenimiento mensual (más de $150 mensuales) y el costo de renovación anual (superior a $1.500). Nuestros prestamos no tienen costo adicional para el cliente, y tampoco necesita tener una cuenta de banco.
Ofrecemos hasta 24 cuotas, cuando la mayoría de las tarjetas ofrece hasta 18.